Elaboración De Instrumentos De Evaluación Diagnóstica, Para Medir Los Aprendizajes De Los (Las) Estudiantes De Cuarto Y Octavo Básico De Enseñanza Básica, En Las Asignaturas de Matemática Y Lenguaje Y Comunicación Colegio “Parque Las Américas”
Date
2014
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Universidad Miguel de Cervantes. Magíster En Educación Mención Currículum y Evaluación Basado En Competencias
Abstract
Una cuestión de género
He considerado pertinente señalar que, utilizaré de manera
inclusiva términos como “el docente”, “el estudiante”, “el profesor”, “el
alumno”, “el compañero” con sus respectivos plurales, como sus
equivalentes en el contexto de este trabajo para referirme a hombre y
mujeres. De acuerdo a la información disponible, no existe un acuerdo
universal respecto a de cómo identificar conjuntamente a ambos sexos
en nuestro idioma, con la excepción de utilizar “o/a”, “los/las” y
expresiones similares, lo que a mi entender y el de muchos entendidos
correspondería a una saturación gráfica que puede dificultar la
comprensión del trabajo aquí detallado.
El paradigma
El sistema educación ha instalando una etapa de nuevas
directrices que persiguen alcanzar más calidad y equidad en los
aprendizajes de los estudiantes. Los programas de estudios que vieron
la luz en diciembre de 2012 tienen como propósitos cumplir el objetivo
de convertirse en herramientas claras y enriquecedoras en las manos
de los profesores para mejorar más y mejores aprendizajes.
La orientación de la Unidad de curriculum del Ministerio de
Educación es que, con estos programas los profesores podrán
desarrollar conocimiento, habilidades y actitudes relevantes y
actualizadas. Estas orientaciones suponen que con la bajada de estos
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programas a la sala de clases se vincularán a los estudiantes con
nuestra identidad cultura y por extensión los integrará a nuestro mundo
globalizado. Sin embargo, queda fuera un elemento que no se ha
percibido a nivel docente, y que es: el acompañamiento que debió
entregar el Mineduc a los profesores para transitar de un paradigma
conductista centrado en el contenido a uno más constructivistas cuyo
foco son las habilidades y destrezas. La ausencia de capacitación para
el tratamiento de estos programas ha dejado, no solo a los profesores, y
al cuerpo de supervisores ministeriales, sujeto a sus experiencias
previas en un espacio crítico de desarrollo, se entenderá, entonces, la
dificultad que tenemos los profesores a la hora de desarrollar nuestra
gestión en el aula; entonces a la hora de evaluar el proceso de
aprendizaje tenemos la dificultad de reencontrar un proceso basado en
un paradigma recién pasado con la solicitud del desarrollo de
habilidades y sus medidas en procesos.
El proceso
Al momento de abordar este desafío planteado por mi
capacitación, me queda la sensación que estamos transitando desde un
paradigma centrado en el contenido con un fuerte énfasis en la
flexibilidad en la gestión de aula, desde el punto de vista de los mismos
contenidos a un paradigma de habilidades, destrezas y actitudes no tan
flexible y concentrado en cuatro unidades. El anterior hacia muy difícil su
seguimiento y monitoreo y el actual facilita esos procesos, así como el
acompañamiento asociado a la gestión docente de aula.
Es en este contexto que esta profesora básica asume el desafío
planteado por este Magister, esto es: derechamente abordar el
diagnóstico en la asignatura de Lenguaje y Matemáticas, en cuarto año
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básico, según Las Bases Curriculares de Educación Básica y, octavo
año, según las Bases Curriculares de Enseñanza Media.
Las Bases Curriculares establecen Objetivos de Aprendizajes
(OA) para enseñanza básica y Aprendizajes esperados (AE) para la
enseñanza media. Estos integran habilidades, conocimientos y actitudes
que se consideran importantes para los estudiantes en su desarrollo
equilibrado para enfrentar su futuro de la mejor manera posible y su
participación racional y responsable en nuestra comunidad global.
Al Ministerio de Educación le corresponde la tarea de entregar
programas de estudios que permitan que los docentes, mediante la
gestión de aula, implementen las Bases Curriculares, especialmente en
Escuelas como la que sirvo y que no ha optado por programas propios.
Como elemento relevante, puedo señalar que, a cada Objetivo de
Aprendizaje y/o Aprendizaje esperado se le ha asociado un conjunto de
indicadores de logro, que dan cuenta de manera muy completa de
diversas formas que un estudiante puede demostrar que ha aprendido.
Entonces, es posible hacer un tránsito desde lo más elemental a lo más
complejo, lo permite, por supuesto, adecuarse a diferentes estilos de
aprendizaje. Como ayuda suplementaria, los programas proporcionan
actividades de aprendizaje y de evaluación. Sirviéndome, entonces, de
esta valiosa herramienta es que el presente trabajo, los ha utilizado
como insumo para elaborar pruebas de diagnóstico en las asignaturas
de lenguaje y matemáticas en cuarto y octavo año, respectivamente.
La metodología utilizada corresponde aquella que describe la
información agrupada por ejes temática en las asignaturas que son
objeto de este abordaje expresada en porcentaje de logros y en gráficos
para facilitar el análisis y la búsqueda de remediales en los nudos
críticos.
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En la construcción de los instrumentos evaluativos he
considerado, por supuesto, los Objetivos de Aprendizajes y los
Aprendizajes Esperados con sus respectivos indicadores de evaluación
en ambas asignaturas para establecer las habilidades, actitudes y
conocimientos adquiridos en el proceso de entrada al proceso de
aprendizajes de los estudiantes del Colegio “Parque Las Américas”. Así
mismo, he considerado el estilo de planificación del docente para
recoger la respuesta a la diversidad de aprendizajes de los estudiantes y
considerarlos en el instrumento, los recursos de aprendizajes utilizados,
los que han contribuido en mi reflexión y en la formulación de
remediales.
He procurado promover aprendizaje a través de esta evaluación,
por lo que recopilado trabajos realizados por los estudiantes de manera
de tener la mayor y mejor información sobre lo que saben y debería
saber y de lo que son capaces de hacer. Me preocupé de colocar en los
instrumentos los criterios de evaluación para que supieran qué se les
estaba solicitando, esto facilitó el hecho que en el desarrollo de los
instrumentos los estudiantes conocieran sus fortalezas y debilidades e
inducir un proceso de autoevaluación como estrategia para involucrar
activamente a los estudiantes en su proceso de aprendizaje.
La generación de reportes evaluativos permitió que las
devoluciones de los resultados a los estudiantes, apoderados y colegas,
fuera preciso y altamente técnico lo que facilitó la discusión en todos los
estamentos